alicante. A primera hora de la tarde de ayer, el presidente de la Autoridad Portuaria de Alicante, Juan Antonio Gisbert, fallecía víctima de un cáncer que venía padeciendo desde hace un tiempo.
Con un perfil mediático y público muy bajo, la llegada de Gisbert a la presidencia del Puerto de Alicante supuso un giro de 180 grados. Llegó a la presidencia de la Autoridad Portuaria de Alicante en 2015, de la mano del actual presidente de la Generalitat Valenciana, cuya idea inicial fue tenerlo en el Consell, un cargo que Gisbert rechazó.
Durante los casi siete años que ha ostentado la presidencia de la APA, Gisbert sentó las bases de la transformación de la dársena alicantina con una serie de proyectos que van a configurar al puerto del futuro y le van a permitir afrontar con cierta solvencia los retos a los que se enfrentará en los próximos años.
El hasta ahora presidente de la APA supo imprimir su sello técnico a la gestión portuaria. 2021 acabó con unos beneficios de más de dos millones de euros a pesar de la pandemia, dejando perfiladas actuaciones como la nave cerrada para los graneles de Eiffage, las oficinas de Distrito Digital para la atracción de empresas, la aprobación y puesta en marcha de una segunda terminal gestionada por Gesport y JSV, un centro logístico de la multinacional Dascher en la ZAL, y, sobre todo, la gran apuesta por la integración puerto-ciudad, con la renovación de los paseos y la construcción de una “isla” flotante que acogerá un restaurante.