MADRID. Entre las conclusiones alcanzadas, FETEIA ha destacado “la falta de comunicación de las administraciones con nuestro sector; la diversidad de criterios, sistemas informáticos y procedimientos en cada lugar, careciendo de la más mínima uniformidad; la falta de personal en las inspecciones especiales, principalmente Sanidad y Farmacia, y de un órgano de mando común, lo que ralentiza el comercio e incrementa los costes”.
Además, la federación de transitarios ha subrayado “la inseguridad jurídica que se genera a los operadores y, por ende, a sus clientes, al promulgar normas con una insuficiente calidad legislativa y con poco margen para su debate y mejora, sin tener en cuenta la realidad económica y operativa de las empresas, e incluso la existencia de sanciones no amparadas en textos normativos”.
Finalmente, ha señalado “la necesidad de dotar de beneficios reales a los OEA. La práctica totalidad del colectivo considera que las ventajas previstas en la norma no se perciben en la práctica. Debe tenerse en cuenta que, a pesar de su futura desaparición, el OEA de simplificaciones aduaneras se mantendrá vigente en el medio plazo”.
El propósito del estudio es realizar un análisis crítico del funcionamiento de los distintos servicios que operan en los Puestos de Control Fronterizo y auditar la relación entre los operadores y las administraciones, todo ello con el fin de identificar las deficiencias y puntos de mejora.
“Desde la Federación Española de Transitarios existe un firme compromiso de trabajo para mejorar nuestro sector, evidenciando y denunciando cuantas irregularidades se detecten para que los servicios ofrecidos y prestados estén a la altura de las circunstancias, manteniendo siempre la mano tendida a las Administraciones para desarrollar una colaboración leal desde una posición proactiva”, ha concluido la organización.