El presidente de la Autoridad Portuaria de Valencia, Joan Calabuig, ha apostado por crear “un marco de consenso” respecto a la importancia de ejecutar “infraestructuras e inversiones estratégicas para la Comunitat Valenciana” con el objetivo de que el Puerto de Valencia “no se convierta en un campo de batalla”.
VALENCIA. Para Calabuig, el retraso en estas infraestructuras puede afectar a la competitividad de las empresas valencianas en los mercados exteriores, ya que su no ejecución “pueden provocar congestiones y desvíos de tráficos a otros puertos”.
”Estamos ante una cuestión fundamental”, ha asegurado Calabuig, que además ha pedido “mirar hacia el futuro con perspectiva, esforzándonos por llegar a un acuerdo”. El presidente de Valencia ha advertido que “no podemos perder tiempo” y ha demandado que Valenciaport “no se convierta en un campo de batalla”.
Joan Calabuig ha hecho estas declaraciones durante la presentación por parte de Propeller Valencia de los resultados del Estudio de Impacto Económico y Social de la Autoridad Portuaria de Valencia (APV) elaborado con datos correspondientes al ejercicio 2019 y que ha elaborado de manera independiente la consultoría Analistas Financieros Internacionales (AFI) y la empresa Prometeia para Valenciaport.
Alfredo Soler, presidente de Propeller Valencia, ha puesto en valor el papel de los puertos gestionados por la Autoridad Portuaria de Valencia como herramienta de competitividad para las empresas exportadoras. En ese sentido, ha subrayado la alta conectividad de Valenciaport y la importancia de ésta para la economía. El recinto valenciano es el primer español por conexiones internacionales, una conectividad que le ha llevado a ocupar el puesto 21 en el Índice Mundial de Conectividad de la UNCTAD (LCSI).
”Esa conectividad está hoy en peligro”, ha señalado Soler, poniendo el acento en “las críticas que se realizan al tráfico de trasbordo”. “El tener un puerto con una conectividad tan alta y su capacidad para atender a los megabuques son importantes por cuanto hace que no necesitemos servicios reefer adicionales”, algo que, ha recordado el presidente de Propeller Valencia, “aumenta los costes logísticos”, algo que en un momento de inflación como el actual “dificultaría aún más que el consumo se recuperase”
Por ello, ha instado a “no perder estos tráficos y a evitar situaciones de congestión que nos hagan perder ese trasbordo”. Esa conectividad ha sido un factor determinante para que una empresa como Volkswagen se haya decantado por la Comunitat Valenciana para instalar su futura gigafactoría.
Por otro lado, Alfredo Soler ha valorado los empleos generados por el clúster de Valenciaport, que el estudio cifra en casi 50.000. “Estos empleos son de calidad y bien remunerados, lo que se traduce en mayores ingresos fiscales, por tanto, en el desarrollo de mayores políticas sociales”.
El presidente de Propeller Valencia ha recordado que la puesta en marcha de la gigafactoría de Volkswagen y la recuperación de la actividad económica, sobre todo en industrias como la turística o la azulejera, va a requerir el crecimiento de las infraestructuras portuarias. “En estos momentos, no estamos preparados para atender esa demanda futura”, ha advertido.
Por su parte, Diego Vizcaíno, socio director de Analistas Financieros Internacionales (AFI), una de las entidades que ha elaborado el estudio, ha resaltado el “efecto tractor” que la actividad de Valenciaport tiene en la economía de su entorno, así como la “actividad robusta y estable” de todo el clúster.
Impacto social
El Estudio de Impacto Económico y Social de Valenciaport también aporta cifras destacadas de la actividad solidaria de la comunidad portuaria valenciana. Se centra principalmente en el balance de actividad de la última década de Aportem-Puerto Solidario València.
Esta asociación -declarada de utilidad pública y totalmente privada– está formada por 40 instituciones, empresas y particulares vinculados al sector portuario y el Distrito Marítimo de Valencia. Su actuación se centra sobre todo en el entorno del recinto valenciano, con especial atención al cuidado del medioambiente y a las personas más vulnerables que viven en los barrios vecinos.
Según señala el informe, Aportem colabora de media al año con 36 organizaciones, más de 1.000 menores y 250 familias. Entre sus principales cifras en la última década destaca la donación de 20 toneladas de comida, las casi 20.000 prendas o las más de 18.000 equipaciones deportivas entregadas desde su creación.
Al evento ha acudido una importante representación de la comunidad portuaria y logística valenciana, así como líderes de importantes asociaciones empresariales de la Comunitat Valenciana, como Vicente Boluda, presidente de AVE; Vicente Nomdedeu, presidente de ASCER, o Cristina Plumed, presidenta de ASECAM, entre otros.
El clúster de Valenciaport genera 50.000 empleos
Esta mañana, Propeller Valencia, asociación de empresarios y directivos logísticos, ha presentado el “Estudio de Impacto Económico y Social de la Autoridad Portuaria de Valencia (APV)”, elaborado con datos correspondientes al ejercicio 2019 y que ha realizado de manera independiente la consultoría Analistas Financieros Internacionales (AFI) y la empresa Prometeia para Valenciaport.
Los resultados de este informe dan continuidad a la información analizada en el anterior estudio de impacto económico elaborado por la Universidad Politécnica de València (UPV), centrado entonces en el año 2016.
En el trabajo de la Politécnica de 2016 se presentaba a Valenciaport como empresa que generaba 38.866 puestos de trabajo; es decir, el 2,09% del total del empleo autonómico. En el estudio que con la misma metodología firman AFI y Prometeia, en base a datos de 2019, Valenciaport genera casi 50.000 puestos de trabajo (concretamente 49.280), lo que representa el 2,5% del total de la Comunitat. Estos 50.000 empleos indicarían que, en tres años, los muelles que gestiona la de la Autoridad Portuaria de Valencia han dado empleo a 10.414 personas más (un incremento del 27% respeto a 2016).
En relación al VAB, éste lo evaluaba la Politécnica en el año 2016 en 2.500 millones de euros (que representaba el 2,39% del Producto Interior Bruto total de la Comunitat Valenciana). Tres años después, AFI/Prometía sitúan este valor añadido en 3.216 millones de euros (cifra que equivale al 3,07% del del PIB total CV). Comparando ambos, se aprecia cómo en tres años, la aportación del puerto al VAB de la Comunitat y su hinterland se ha incrementado en 716 millones de euros (un 29% más).
Los resultados del estudio desvelan también el relevante efecto tractor de los tres recintos gestionados por la Autoridad Portuaria de Valencia ya que, por cada euro que se genera en ellos, la economía de la Comunitat produce 3,3 euros adicionales. En esta misma línea señala que cada puesto de trabajo que se crea en el ámbito portuario se generan otros cinco en el conjunto de las tres provincias valencianas.
En relación a los salarios, el informe destaca que los salarios brutos de las empresas portuarias son casi el doble de la media de la Comunitat y su efecto arrastre hace que los salarios que directa o indirectamente se derivan de la actividad de Valenciaport se mantengan también por encima de la media.
Respecto a los ingresos fiscales, este estudio revela que las arcas públicas ingresaron 227 millones de euros en el 2019 por las actividades económicas vinculadas a Valenciaport, cifra que representa un 26% más que en 2016.