El Puerto de Gotemburgo es ampliamente conocido como uno de los puertos más desarrollados del mundo en materia de medioambiente y ha sido pionero en este tipo de acciones durante muchos años. La energía en tierra para los buques ha estado disponible desde principios de la década de 2000, y desde 2013 se aplica un descuento especial de tarifa para los buques que reporten un buen desempeño ambiental. En ese sentido, la Autoridad Portuaria de Gotemburgo ha sido neutra en términos climáticos desde 2015.
Para aumentar aún más su competitividad, la Autoridad Portuaria de Gotemburgo adoptó nuevas metas ambientales mucho más exigentes en octubre. Según estos nuevos objetivos, las emisiones de carbono relacionadas con el puerto se reducirán en un 70% para 2030 no sólo dentro del puerto, sino también en un área que se extiende desde la entrada del puerto exterior a 15 kilómetros al oeste, hasta el límite de la ciudad.