Organizada por el Grupo Grimaldi, la convención puso encima de la mesa los dos grandes retos a los que se enfrenta no sólo el transporte marítimo de corta distancia, sino todo el negocio del shipping en los próximos años: sostenibilidad y, a la vez, crecimiento económico.
El camino recorrido por la naviera napolitana en los últimos años es un ejemplo de lo que se puede ir haciendo. Altas dosis de inversión con las que ir renovando la flota, la introducción de nuevas tecnologías y una apuesta decidida por la investigación e innovación. Estos son los tres pilares en los que sustentar el objetivo último: lograr una mayor eficiencia. Será de la mano de esa eficiencia cuando se pueda conseguir el mismo objetivo utilizando menos recursos. Esta idea la repitió como un mantra Emanuele Grimaldi, director general del grupo naviero napolitano, en cada una de sus intervenciones. Para Grimaldi, la inversión en nuevos buques más eficientes no es un objetivo en sí mismo, sino el camino para reducir las emisiones contaminantes. Su compañía invertirá unos 2.000 millones de euros en nuevos buques en los próximos años, además de otros 600 para renovar los buques actuales.
Los armadores piden a las instituciones europeas una mayor implicación para fomentar el transporte marítimo de corta distancia
Emanuele Grimaldi, director general de Grupo Grimaldi, durante su intervención. Foto: R.T. Estas inversiones, “tras las cuales no nos vamos a detener”, son esenciales para la compañía, pues demuestran el sólido compromiso de la naviera con lograr un transporte menos contaminante.
En la búsqueda de esa mayor eficiencia, no sólo tienen algo que decir la optimización de recursos o nuevos procesos internos, sino también la implementación de nuevas tecnologías, sobre todo en los nuevos buques. De nuevo, Grimaldi es la avanzadilla. Sus buques de la clase ECO son un claro ejemplo. “Podemos mover un 25% más de carga con un 24% menos de emisiones”, aseguro el director general de la compañía.
Esa sostenibilidad, además, debe venir acompañada de actuaciones en el lado tierra, donde la apuesta por el ferrocarril y la conectividad con el hinterland van a ser determinantes. Ahí es donde entran en juego las instituciones. Sin embargo, el papel que debe jugar Europa en este caso debe ser doble.
Por un lado, los grandes operadores de las autopistas del mar piden una mayor implicación a la hora de poder promocionarlas. Durante la convención se habló de afianzar este tipo de transporte mediante incentivos, aprovechando la situación por la que pasa el transporte terrestre –altos costes por combustible y falta de conductores-. Sin embargo, el sector teme que esa intervención de las instituciones pueda traducirse en una mayor carga impositiva, algo que, según la industria, podría restarle atractivo al short sea shipping y volver a poner los camiones en la carretera.
Energía nuclear, una posibilidad En la búsqueda de una mayor sostenibilidad del transporte marítimo de corta distancia, durante la conferencia se puso encima de la mesa la posibilidad de utilizar la energía nuclear como medio para propulsar los buques. Ugo Salerno recordó que los barcos rompehielos del Ártico ya utilizan este combustible.
Con todo, armadores e industria marítima matizaron que es una posibilidad que “está en estudio”, y reconocieron que es un tipo de energía que levanta “suspicacias”. De todas formas, tanto armadores como parte de la industria no ven con malos ojos esta posibilidad, ya que la fabricación de otros combustibles alternativos como el hidrógeno o el amoníaco “es muy contaminante”.
Y es que, aunque los grandes armadores europeos, entre los que se incluye Grupo Grimaldi, están destinando una gran suma de dinero a una mayor sostenibilidad de sus servicios, lo cierto es que todos buscan una mayor eficiencia utilizando los combustibles ahora disponibles.
El papel del SSS
La convención también sirvió para que la industria del TMCD reivindicara su papel no sólo en el presente, sino para los tiempos que deben venir. El trasbase de cientos de camiones a los buques es un argumento que utilizaron todos los expertos, algo que hace al SSS “el modo más sostenible de transporte marítimo”.
No hay que olvidar, además, que el debate abierto en todo el mundo sobre la relocalización de la industria es importante para las autopistas del mar. Aunque es una tendencia que llegará a largo plazo –si lo hace- su consolidación puede hacer aún más imprescindible el transporte marítimo de corta distancia, en el momento en que los centros de producción se acerquen a los de consumo y no sea necesario un transporte marítimo interoceánico tan intenso.
EL DATO
2.600Grupo Grimaldi tiene previsto invertir en los próximos años un total de 2.600 millones de euros, de los cuales 2.000 se destinarán a la adquisición de nuevos buques y el resto a renovar parte de su flota.
Eje tractor
Una vez más, ha quedado patente la importancia de un grupo naviero como Grimaldi en Europa. La XXIV Euro-Med Convention ha servido para volver a testar la situación en la que queda este tipo de eventos tras el control de la pandemia sanitaria y el levantamiento de las restricciones.
La presencia de cientos de profesionales en el evento hace que el acto se haya convertido en un éxito no sólo de convocatoria, sino que ha dejado en evidencia el poder tractor de Grupo Grimaldi para el sector portuario y logístico español. Representantes de los puertos de Valencia y Barcelona, así como de destacados operadores logísticos se dieron cita el pasado viernes en el Palacio de Congresos de la capital del Turia.
Miembros de la primera mesa de debate. Sentados: Esben Poulsson, presidente de ICS; Cleopatra Doumbia-Henry, presidenta de la Universidad Mundial Marítima de la IMO; Emanuele Grimaldi, director general de Grupo Grimaldi; Ugo Salerno, CEO de Riba; y Aurelio Martínez, presidente de la APV. Se conectaron de manera telemática: Kurt Bodewing, coordinador europeo para las autopistas del mar; Hiroyuki Yamada, director de la División de Investigación Marina de la OMI. Abajo: Guy Platten, director general de ICS, ejerció de moderador. Foto: R.T. El sector naviero busca en las nuevas tecnologías el camino hacia la sostenibilidadLa sostenibilidad no debe ser entendida únicamente como una reducción de las emisiones contaminantes de la industria marítima, sino también como una búsqueda de una mayor eficiencia gracias a la utilización de nuevas tecnologías, es decir, mover la misma carga con menos recursos y menos consumo energético. Con esta idea concluyó la primera mesa de debate de la XXIV Euro-Med Convention. Participaron Esben Poulsson, presidente de ICS; Cleopatra Doumbia-Henry, presidenta de la Universidad Mundial Marítima de la IMO; Emanuele Grimaldi, director general de Grupo Grimaldi; Ugo Salerno, CEO de Rina; Aurelio Martínez, presidente de la APV; Kurt Bodewing, coordinador europeo para las autopistas del mar; e Hiroyuki Yamada, director de la División de Investigación Marina de la OMI.
Todos coincidieron en señalar que el cambio climático “es un reto sin precedentes” al que hay que darle una respuesta “inmediata”. Así, quedó patente el papel que juegan no sólo las compañías navieras, sino también los puertos y las instituciones europeas e internacionales.
Pero la búsqueda de esa mayor sostenibilidad debe llegar, sobre todo, por la vía de la implementación de nuevas tecnologías que lleven a una mayor eficiencia en todos los procesos. La utilización de “toda la tecnología que tengamos a nuestro alcance” se convierte así en una herramienta “fundamental”.
Durante la mesa de debate, Aurelio Martínez expuso la estrategia de Valenciaport en este campo, con el “ambicioso objetivo” de llegar a las 0 emisiones en 2030. En este objetivo juega un papel importante la formación, algo sobre lo que incidió más tarde Cleopatra Doumbia-Henry, un factor que va a permitir a las futuras generaciones “afrontar los retos a los que nos enfrentamos ahora”.
Con todo, también quedó patente que la velocidad a la que se implementan estos cambios “no es suficiente”, según Esben Poulsson, que pidió a los reguladores “no rechazar de manera sistemática” cada una de las propuestas que se hace desde el sector naviero, y pidió que “nos dejen ser parte de la solución”.
Participantes de la segunda mesa de debate. Daniele Rossi, presidente de la Autoridad Portuaria del Centro-Norte del Mar Adriático; Ettore Morace, consejero delegado de Transmed; Mar Chao, directora de Explotación de Puertos del Estado; Guido Grimaldi, presidente de Alis; Pino Musolino, presidente de la Autoridad Portuaria de Centro-Norte del Mar de Tirreno; Damià Calvet, presidente del Port de Barcelona; Andrea Annunziata, presidente de la Autoridad Portuaria del Mar Central de Tirreno; y Sergio Luciano, moderador. Foto R.T. Guido Grimaldi: “Una mayor carga impositiva restaría atractivo al SSS”Para lograr un mayor desarrollo de las autopistas del mar y del transporte marítimo de corta distancia, hace falta una mayor implicación de las autoridades europeas, tanto en el desarrollo de infraestructuras y escenarios de inversión, como en la minoración de la carga fiscal para el sector. Esta fue la principal conclusión de la segunda mesa de debate, que estuvo protagonizada por Daniele Rossi, presidente de la Autoridad Portuaria del Centro-Norte del Mar Adriático; Ettore Morace, consejero delegado de Transmed; Mar Chao, directora de Explotación de Puertos del Estado; Guido Grimaldi, presidente de Alis; Pino Musolino, presidente de la Autoridad Portuaria de Centro-Norte del Mar de Tirreno; Damià Calvet, presidente del Port de Barcelona; Andrea Annunziata, presidente de la Autoridad Portuaria del Mar Central de Tirreno.
Durante su intervención, Guido Grimaldi aseguró que uno de los problemas actuales es que “Europa no entiende la importancia de nuestro papel y nuestra función para la sociedad”, algo que fue refrendado por los presidentes de los puertos italianos. En ese sentido, se instó a los enclaves a “actuar en una mayor electrificación”, donde Europa “debe jugar un papel fundamental”.
Es en este punto donde las instituciones europeas deben actuar “de manera decidida” para desarrollar soluciones logísticas intermodales, donde el ferrocarril tenga un papel principal. Los presidentes de los puertos italianos aseguraron que “estamos en el buen camino”, aunque hace falta ser más “audaces”.
Damià Calvet, por su parte, instó a utilizar la llegada de los fondos Next Generation para promover las autopistas del mar, “así como estaciones intermodales”, y pidió a grupo Grimaldi un esfuerzo para poder “mejorar servicios, frecuencias y poner en marcha nuevas conexiones”.
Mar Chao demandó al sector una “apuesta clara por la digitalización de los procesos”, algo que redundará en una “mayor eficiencia al poder trabajar en tiempo real”. Asimismo, aseguró que desde Puertos del Estado se está haciendo un “gran esfuerzo” por potenciar las inversiones ferroviarias.
Tanto armadores como presidentes de los puertos lanzaron una advertencia: no pervertir el juego con nuevas cargas fiscales. En este punto, Guido Grimaldi advirtió que es “vital” no poner en riesgo “el actual sistema” ya que, de continuar con las altas tasas impositivas, “corremos el riesgo de hacer menos atractivo el transporte marítimo de corta distancia y volver a llenar la carretera de camiones”.
La XXIV Euro-Med Convention reunió el pasado viernes en Valencia a gran parte de los miembros de Grupo Grimaldi y a una buena representación del sector logístico valenciano y catalán. Foto R.T. Galerías XXIV Convención Euro-Med de Grupo Grimaldi 08 octubre 2021