Según las empresas, durante los primeros siete días de huelga de la estiba, el Puerto de Bilbao ha perdido diez escalas de buques, un 22% con respecto a los datos de la semana anterior. Ello ha supuesto que entre el 9 y el 15 de octubre se haya manipulado un 72 % menos de mercancía general y un 71 % menos de contenedores con respecto al movimiento registrado entre el 2 y el 8 de octubre.
Estas cifras “son una muestra evidente de los daños a la economía y al empleo que este conflicto supone para Euskadi y todo el área de influencia de esta infraestructura crítica, una de las principales plataformas logísticas del Arco Atlántico”, señala Bilboestiba, que sostiene que el abastecimiento a la industria y a la población se están viendo “gravemente” afectadas por el desvío de embarcaciones a otros puertos y la demora en la operativa portuaria derivada el incumplimiento de los servicios mínimos.
"Amenazas" y "coacciones"
“Las empresas importadoras y exportadoras están sufriendo graves perjuicios, las plantas industriales ven peligrar el suministro de materias primas indispensables para su actividad y todas las empresas que viven por y para el puerto (transportistas por carretera, operadores logísticos, suministradores de servicios, etc.) están soportando las consecuencias de una huelga protagonizada por unos trabajadores que tienen el empleo asegurado y a los que mueve un sólo propósito: incumplir la ley y seguir controlando los muelles mediante amenazas y coacciones”, según las cuatro empresas estibadoras del Puerto de Bilbao, que aseguran llevar años “sufriendo las presiones y amenazas de un colectivo que ahora ha extendido estas prácticas al personal de empresas auxiliares, habilitado y formado para el desarrollo de tareas complementarias”.
Situación "penosa"
Las empresas estibadoras reiteran que son poco más de 300 trabajadores “muy bien remunerados y con el salario garantizado”, quienes impiden la actividad de otros en su “ya consolidada estrategia de controlar el mercado”. Tal situación ha llevado al servicio de estiba en Bilbao a una situación “penosa” y a las empresas que lo prestan, que aseguran han demostrado su apuesta por el puerto con “ingentes” recursos, a soportar unos costes que comprometen gravemente sus resultados y sus inversiones futuras.
Así, Bilboestiba-Centro Portuario de Empleo ha apelado al compromiso y al apoyo expreso de todas las instituciones para afrontar una situación “que rebasa la capacidad de cuatro empresas y afecta a todo el entramado logístico, industrial y comercial que gira alrededor del puerto en unos momentos cruciales para superar la grave crisis que padecemos”.