Aproximadamente en el mes de abril de 2022, las exportaciones cerámicas españolas iniciaron un descenso que no ha conseguido frenarse y sigue poniendo en jaque la viabilidad de un sector productivo esencial para la economía del país.
El sector cerámico quedó gravemente afectado por la crisis energética en 2022. El sector necesita recuperar parte de esa pérdida de competitividad y de rentabilidad, pero las ayudas recibidas hasta el momento no han sido efectivas. Según fuentes de la patronal Ascer, el sector ha recibido unos 90 millones de euros en ayuda, una cifra insignificante en comparación con los 1.800 millones de sobrecoste soportados.
Los datos estadísticos de 2022 pudieron “salvarse” gracias al incremento del valor de las ventas, aupadas por el incremento de los precios para hacer frente a la subida de los costes de producción. De esta forma, el sector pudo sobrellevar un año crítico, aunque con la certeza de que 2023 iba a ser un duro golpe de realidad. Y así ha sido.
Con datos acumulados al mes de noviembre de 2023, el valor de las exportaciones cerámicas españolas ha caído un 16,5%, mientras que el volumen de las mismas, en metros cuadrados, se ha reducido en un 22,6%.
El panorama es desolador. El sector espera cerrar el año con 1.000 millones de euros menos de facturación (entre un 15% y un 17% menos que en 2022), lo que supondrá alcanzar una cifra de 4.600 millones de euros. El 75% de ese total se dedica a la exportación.
La exportación sigue afectada por la caída de la demanda de los principales mercados. Este descenso se explica en la coyuntura inflacionista actual que está provocando una ralentización del mercado de la construcción.
Asimismo, el producto cerámico español está perdiendo competitividad frente a una competencia muy agresiva, tanto de otros países productores como de otros materiales sustitutivos, y agravada por la falta de ayudas a la industria gasintensiva española.
Europa sigue en cabeza
Atendiendo al valor de las exportaciones, con los datos acumulados al mes de noviembre de 2023, Europa sigue siendo el primer receptor de las exportaciones españolas de material cerámico, con ventas por valor de 1.785,5 millones de euros y un descenso del 11,8% respecto a los once primeros meses del año anterior. Las exportaciones a Europa suponen el 53,6% del total.
Los 27 países socios de la Unión Europea, que acaparan una cuota del 42,3% de las exportaciones, sumaron hasta noviembre 1.408,3 millones de euros en compras de producto cerámico español, un 10% menos que en el mismo periodo de 2022; mientras que los de la zona Euro (los 20 países que usan el euro) adquirieron producto por valor de 1.202 millones, un 9,6% menos.
Por su parte, los países del este de Europa, no incluidos en la UE, protagonizaron uno de los mayores descensos del año (-22,4%), con unas compras de 118,3 millones de euros, frente a los 142,4 del año anterior.
América, el segundo mercado
América, en su conjunto, sigue estabilizado como el segundo mercado para la cerámica española. Con todo, hasta el mes de noviembre de 2023 ha anotado un descenso del valor de sus compras de un 15,2%, pasando de 844,7 millones de euros en 2022 a 716 millones en 2023. El continente americano representa el 21,5% de las exportaciones españolas.
Norteamérica sumó hasta noviembre de 2023 un total de 506 millones de euros en compras de producto español, un 12,7% menos en que 2022. En la misma línea, el principal cliente norteamericano, Estados Unidos, compró cerámica por valor de 420 millones, un 13,1% menos.
Centroamérica, con una cuota de mercado del 3,8%, redujo sus compras en 2023 un 20,1%, alcanzando los 126 millones de euros; mientras que Sudamérica también anotó una caída sensible de sus compras (-21,7%) por valor de 83,5 millones de euros.
Asia, en la senda del descenso
Los países del sudeste asiático y del Extremo Oriente en su conjunto, compraron cerámica española por valor de 484,7 millones de euros hasta noviembre de 2023, un 29,7% menos que en el mismo periodo del año anterior, en el que se alcanzó la cifra de 689,1 millones. Asia representa el 14,5% de las exportaciones cerámicas españolas. Mientras que los países del Extremo Oriente se mantuvieron en la tónica generalizada de descensos (-15,8%), el sudeste asiático protagonizó la caída más suave en términos globales, con una diferencia del -7,4%.
El producto cerámico español está perdiendo competitividad frente a una competencia muy agresiva, tanto de otros países productores como de otros materiales sustitutivos
Oriente Próximo
Los países de Oriente Próximo, tradicionalmente muy buenos clientes de la cerámica española, han anotado hasta 2023 el mayor descenso porcentual por lo que respecta a sus importaciones de cerámica española. Concretamente, hasta el mes de noviembre de 2023 el descenso ha sido del 32,3%, con unas compras por valor de 384 millones de euros, frente a los 567,3 millones anotados el año anterior.
Después de esta caída, Oriente Próximo representa el 11,5% de las exportaciones cerámicas españolas, la cuarta zona geográfica mundial en importancia.
El sector espera cerrar el año con 1.000 millones de euros menos de facturación (entre un 15% y un 17% menos que en 2022)
África
El mercado africano sigue especialmente lastrado por el comportamiento de los países del Magreb, especialmente de Argelia, que sigue con sus puertas cerradas a los productos españoles fruto de la ruptura de las relaciones del gobierno argelino con el español.
Las exportaciones españolas a África (el 9,3% del total) han caído un 22% en 2022, con unas ventas por valor de 308,5 millones de euros. De este total, los países del Magreb han adquirido producto español por valor de 153 millones de euros, un 20,4% menos que el pasado año.
Finalmente, las exportaciones a Oceanía se mantienen estables respecto al año pasado, con unas ventas de 37,5 millones de euros un descenso del 0,1%.
Hasta noviembre de 2023, Europa sigue siendo el primer receptor de las exportaciones españolas de material cerámico, con ventas por valor de 1.785,5 millones de euros (-11,8%)
La UE renueva las medidas antidumping sobre las baldosas cerámicas chinas
El pasado 13 de febrero, la Comisión Europea adoptó el Reglamento (UE) 2024/493, que renueva las medidas antidumping de la UE sobre las importaciones de baldosas y revestimientos cerámicos chinos por cinco años más. Actualmente la cuota de mercado de China en la Unión Europea es del 0,3%
Los miembros de CET (la Federación Europea de Asociaciones de Fabricantes de Cerámica), entre los que se encuentra ASCER (la patronal española), acogieron con satisfacción la decisión de renovar los derechos antidumping, porque “se ha demostrado que son necesarios para evitar un mayor perjuicio a la industria de la Unión resultante de las importaciones objeto de dumping procedentes de China”.
De hecho, “un uso eficaz de las medidas de defensa comercial por parte de la UE es esencial para luchar contra las prácticas comerciales desleales y es una necesidad absoluta para permitir una transición justa”, aseveró el presidente de CET, Roman Blažíček.
La industria de baldosas cerámicas de la UE representa una facturación anual de 13.600 millones de euros y los fabricantes de 25 Estados miembros de la UE generan 55.000 puestos de trabajo directos. “El 80% del sector está compuesto por pymes que desempeñan un papel esencial en el empleo a nivel local y la industria de la UE es reconocida mundialmente por su calidad, tecnologías de producción avanzadas, innovación y diseño”, recuerdan desde ASCER.
A petición de las industrias de la UE, la Dirección General de Comercio de la Comisión Europea inició en noviembre de 2022 una investigación para renovar las medidas impuestas a las importaciones de baldosas cerámicas chinas, en vigor desde septiembre de 2011 y que oscilan entre el 13,9% y el 69,7%.
Como se reveló a lo largo de la investigación y como se establece en el Reglamento, la continuación del dumping y la elevada capacidad productiva excedentaria de China, junto con el atractivo del mercado de la UE para los exportadores chinos, darían lugar con toda probabilidad a una reaparición del perjuicio para el mercado europeo de no renovarse las medidas. Sobre esta base, las medidas antidumping se han renovado por cinco años más. Estos hallazgos subrayan la importancia vital de la igualdad de condiciones para la industria europea de baldosas cerámicas.
Francia sustituye a EEUU como primer cliente de la cerámica española
Una mínima diferencia de 9 millones de euros ha servido para que Francia se sitúe como el primer país receptor de la cerámica española en 2023, por lo menos con los datos acumulados hasta el mes de noviembre. El país galo adquirió producto español por valor de 429 millones de euros, un 4,5% menos que el pasado año. Asimismo, el volumen importado descendió un 9,9%.
Estados Unidos es el segundo país receptor de la exportación española, con 420 millones de euros contabilizados hasta noviembre y un descenso del 13,1% del valor de las ventas y del 11,8% en el volumen de sus importaciones.
Completa el TOP 3 Reino Unido que ha reducido sus compras de producto español un 19,1%, hasta alcanzar los 196,8 millones de euros. El volumen de sus importaciones, asimismo, se ha reducido en un 27,6%.
Diferente comportamiento tuvo Italia, el cuarto socio comercial de la cerámica española, que hasta noviembre redujo el valor de sus compras un 3,7%, hasta los 176,1% millones, y también el volumen adquirido, un 11,1% menos.
Alemania completa el TOP 5 de los principales países destino de las exportaciones cerámicas españolas hasta el mes de noviembre de 2023, sustituyendo en esta posición a Israel, con compras por valor de 133,5 millones (un 17,8% menos que en 2022) y un volumen de producto que fue un 13,9% inferior.
Israel (con 114 millones y un descenso del 37,5% del valor de sus compras); Marruecos (110 millones y 12,6% de caída), Portugal (105,1 millones y 3,5% descenso), Arabia Saudí (80,4 millones y una caída del 39,2%) y Bélgica (75,7 millones en compras, un 22% menos), completan la tabla de los principales países destino de la exportación cerámica española en 2023.
