En los siete primeros meses del año, la situación de violencia en el Mar Rojo está forzando el desvío de rutas marítimas tradicionales, lo que impacta en el incremento de mercancías por los puertos españoles, especialmente en el tránsito de contenedores. Estos picos de actividad se están gestionando por puertos que cuentan con infraestructuras y servicios bien preparados.
En los primeros siete meses del año, la mercancía general aumentó el 7,1%, respecto a 2023, con 165,6 millones de toneladas, destacando principalmente su presentación en contenedor, +9,8%, frente al incremento moderado de la mercancía general convencional, +1,4%.
Los TEUs aumentaron un 11,7% respecto al mismo período del año anterior, con 10,6 millones de toneladas, en línea con el ritmo de crecimiento marcado desde principios de año, debido sobre todo al fuerte repunte de los TEUs en tránsito (+18,7%), en puertos como Barcelona, Valencia, Bilbao o Las Palmas. entre otros.
Los graneles líquidos registraron un alza del 4%, hasta 106,8 millones de toneladas, debido especialmente al buen comportamiento de los productos químicos (+115,2%), y de la gasolina (+20,7%), y en general petróleo y productos derivados.
Todos los tráficos registraron incrementos entre enero y julio, a excepción de los graneles sólidos que, con 49,1 millones de toneladas, sufrieron un descenso del 10,1% respecto al mismo periodo de 2023, derivado de la caída del carbón (-55%) y también de los productos siderúrgicos, del cemento y de algunos productos alimenticios.
El tráfico ro-ro creció el 0,4% hasta 43,6 millones de toneladas.
El número de buques mercantes por los puertos españoles aumentó en los primeros siete meses del año el 1,3% con un total de 95.182 unidades, y el arqueo bruto creció un 3%.