GIJÓN. Nieves Roqueñí sustituye a Laureano Lourido, que ha permanecido más de 9 años al frente del Puerto de Gijón, tal y como anunció el presidente del Principado de Asturias, Adrián Barbón.
El presidente del Principado ha justificado la elección de Roqueñí para dirigir El Musel, un puerto “absolutamente estratégico” para Asturias, por su formación –doctora ingeniera de minas-; por su trayectoria profesional, por su solvencia y, también, por su “empatía y bonhomía”, la consejera es “la mejor persona” para ese puesto. “Tiene mi total y absoluta confianza”, ha añadido.
La nueva etapa de El Musel se definirá con tres rasgos: vocación industrial, seguridad y limpieza. El presidente ha destacado la capacidad de interlocución de la actual consejera para atender las demandas de quienes viven en las cercanías de la zona portuaria y su preocupación por las repercusiones ambientales de la actividad industrial. “Queremos un puerto que mire a la ciudad”, concluyó Adrián Barbón.
El Musel es una de las piezas clave para la actividad económica y logística de Asturias. Durante los últimos años se ha intensificado el interés empresarial por asentarse en el puerto, con proyectos como los liderados por el Grupo Zima o Ionway (pendiente de la decisión final de la compañía). La vinculación del puerto con la Zona de Actividades Logísticas (Zalia), desbloqueada esta legislatura, es también crucial para que Asturias se convierta en el polo logístico del Cantábrico, como se plantea el Principado.
Al frente de Transición Ecológica, Roqueñí ha agilizado la tramitación ambiental de algunas de esas iniciativas, al igual que con el horno eléctrico de Arcelor en Veriña, que supondrá un desembolso de 213 millones. También ha promovido la redacción y aprobación de la Ley de Proyectos de Interés Estratégico, concebida para la reducción de plazos y trámites burocráticos de las propuestas con especial incidencia económica.