Las obras se iniciarán el próximo abril y tienen un plazo de 18 meses. La intervención comprende una rehabilitación integral del edificio que, con 4.828 metros cuadrados construidos, se destinará a uso administrativo y de servicios portuarios. Este edificio quedó vacío en 2010 y en 2013 el Port de Tarragona empezó a trabajar para darle nuevos usos y recuperarlo el para integrarlo en el skyline de la ciudad. El edificio tendrá un uso mixto, acogiendo los servicios de Port Control, los servicios técnicos y administrativos de Salvamento Marítimo, el área de señales marítimas de la APT y el área administrativa de la Corporación de Prácticos. También habrá salas operativas para Capitanía Marítima y para la Dirección de Operaciones Portuarias así como una sala de crisis. Otras plantas acogerán oficinas de terceras empresas.