El informe, elaborado por Oxford Economics, muestra el compromiso de la industria con el turismo responsable y con el avance continuo en el desarrollo y la implementación de nuevas tecnologías medioambientales, para lo cual las empresas ya están realizando importantes inversiones.
"Si bien el sector de los cruceros ha sido uno de los más afectados por la pandemia global, las compañías de cruceros continúan a la vanguardia, afrontando el desafío que supone desarrollar nuevas tecnologías medioambientales que benefician a toda la industria marítima", ha señalado Kelly Craighead, presidenta & CEO de CLIA.
Combustibles alternativos
Para alcanzar los objetivos medioambientales fijados, es fundamental emplear combustibles nuevos y alternativos, como el biodiesel, el metanol, el amoniaco, el hidrógeno y las baterías eléctricas. En este sentido, el estudio pone de manifiesto que, además del Gas Natural Licuado (GNL), "más de las tres cuartas partes de la flota actual, en términos de capacidad, está equipada con sistemas que permiten el uso de otros combustibles".
No obstante, el informe también pone de manifiesto que existen barreras de carácter tecnológico, logístico y de distribución, y regulatorios que impiden el desarrollo de estos combustibles alternativos para que puedan ser usados de manera generalizada.
El lado positivo es que el camino hacia este objetivo ya ha comenzado, puesto que se han incrementado las inversiones realizadas por la industria en la construcción de nuevos barcos de última generación, lo que está ayudando a la investigación y el desarrollo de estos combustibles.
Existen barreras de carácter tecnológico, logístico y de distribución, y regulatorios que impiden el desarrollo de los combustibles alternativos
"Sabemos que todavía queda mucho trabajo por hacer, pero la industria de cruceros ha demostrado tanto su compromiso como su capacidad para afrontar este desafío; está catalizando la innovación marítima sostenible, que será clave para la descarbonización del transporte. Este es el motivo por el que CLIA se ha unido a otras organizaciones marítimas para proponer la creación de un fondo de 5 mil millones de dólares en el seno de la Organización Marítima Internacional (OMI). Estos fondos irían destinados a favorecer el I+D, con el objetivo de acelerar el desarrollo de combustibles y de nuevas tecnologías de propulsión”, ha explicado Pierfrancesco Vago, presidente de CLIA Global.