TARRAGONA. El ejercicio práctico se ha llevado a cabo en el muelle de Baleares y en él se ha podido comprobar el rendimiento y resultados de varios equipos ofrecidos por Markleen, empresa especializada en soluciones de protección medioambiental. Concretamente, se han probado tres sistemas de lucha contra la contaminación marítima distintos.
El primer sistema ha consistido en el despliegue de una barrera autoinflable ubicada dentro de un contenedor a pie de muelle, que funciona mediante un sistema eléctrico e hidráulico. Esta solución permite un despliegue cómodo y con menos recursos humanos, gracias a que es autohinchable. Además, ofrece mayor rapidez que otros sistemas menos automatizados, mejorando el tiempo de respuesta ante un posible incidente.
El segundo sistema utilizado durante el ejercicio práctico ha sido una barrera marina de 250 metros desplegada desde una embarcación. A diferencia del primer sistema, en este caso toda la operativa se ha realizado en el agua. Este equipo destaca por el breve tiempo de despliegue de toda la barrera, que queda extendida en la zona a perimetrar en cuestión de segundos. Por último, el tercer sistema que se ha comprobado ha sido una nueva barrera autoinflable colocada en el muelle en un carrete con un sistema 100% eléctrico, que también ofrece un rápido tiempo de respuesta.