barcelona. El Port de Barcelona hizo ayer balance de un primer semestre en el que la innovación ha protagonizado su estrategia y le ha permitido hacer una valoración positiva de un período en el que, sin embargo, los tráficos cayeron un 10,6%, lastrados por los graneles líquidos y los contenedores de transbordo.
Su presidente, Lluis Salvadó, valoró de forma positiva la actividad desarrollada a lo largo de los seis primeros meses, que han tenido en la innovación, con el despliegue de varios proyectos, su rasgo más visible, tanto por el número como por la relevancia de dichos proyectos.
Salvadó explicó que durante el primer semestre del año los esfuerzos se han centrado en innovar en todos los ámbitos de actividad propios del puerto, lo que ha permitido “completar nuestra hoja de ruta, con iniciativas relevantes que deben garantizar el desarrollo sostenible del Puerto de Barcelona y que lo sitúan como un referente a nivel internacional”.
