BARCELONA. Las parejas, que han anidado en edificios del puerto pero también en espacios naturales como los acantilados de Montjuïc, han disparado el número de nacimientos de halcones, que llegaron a una decena en el 2021.
Esta creciente población de halcones reafirma el éxito del proyecto de reintroducción del halcón peregrino en Barcelona, iniciado en 1999 y que incluyó hasta 12 liberaciones en el recinto del Port de Barcelona. Aquella primera docena de halcones participaron en la aparición de las primeras parejas reproductoras establecidas en Catalunya, la primera en Tarragona, y en Barcelona, concretamente en el acantilado de Montjuïc y en Diagonal Mar, en 2004.
Durante más de una década, la de Montjuïc fue la única pareja en hacer nido en el Port, pero eso cambió en el 2017, cuando se instaló una pareja en la empresa Ergransa, una de las terminales de graneles sólidos, y en el 2019, cuando se establecieron otras dos parejas, una en la torre Jaime I del teleférico de Montjuïc, en el muelle de Barcelona, y una en uno de los depósitos de Enagas en el muelle de la Energía.
El número de nacimientos mantiene una clara tendencia al alza y desde 2004 han nacido en el Port de Barcelona 75 halcones, 30 de ellos sólo en los últimos cuatro años.