El número de coches calcinados asciende a 16, pero hasta 40 habrían sufrido daños que impiden su comercialización, según la Autoridad Portuaria de Vigo, propietaria de los terrenos. Las primeras estimaciones ente portuario apuntan a que las pérdidas podrían alcanzar el 1,5 millón de euros. Las llamas se registraron en la parcela D situada en el área oeste de la terminal Ro-Ro, un espacio cedido a la Autoridad Portuaria por Zona Franca.