En virtud de dicho acuerdo, el Consorcio de la Zona Franca de Santander renuncia a la concesión de subsuelo en el muelle de Maliaño de tuberías para la conducción de graneles líquidos y pulverulentos, que está en vigor. Como contrapartida, y con el objetivo de que la Zona Franca pueda seguir prestando sus servicios de este tipo de graneles, le será otorgada una concesión por 25 años en el muelle de la Margen Norte, con destino a la instalación de tres tubos para carga y descarga de graneles líquidos no peligrosos con una inversión superior a los 700.000 euros.
Más espacio
Por otro lado, se acuerda el inicio de la tramitación de rescate de parte de una concesión a la Zona Franca, situada en la zona adyacente a los muelles de Maliaño, en la parte sureste de sus instalaciones, que ocupa una superficie de 9.788 metros cuadrados, y que pasará a formar parte del conjunto del proyecto de la nueva terminal de ferry y la instalación de Gas Licuado para buques.
La Zona Franca, por su parte, sigue trabajando en su lógica aspiración de ganar espacio y, de hecho, cuenta desde hace tres meses con un almacén en el Polígono Wissocq con condición de Depósito Aduanero, y buscando nuevas ubicaciones y posibilidades de inversión; mientras encuentra una solución más definitiva y de mayor calado, de contar con más metros cuadrados para así poder incrementar su actividad.