En su día, aunque no podía influir y ahora tampoco, estuve en contra de la proliferación de aeropuertos en Galicia, cuando se defendía que tenía que haber más de un aeropuerto.
Era la época de los inicios de Peinador (Vigo) y Alvedro (La Coruña), cuando teníamos ya aeropuerto en Labacolla (Santiago), que dotándolo de medios tecnológicos y de una buena comunicación con las principales ciudades gallegas haría que no necesitáramos más aeropuertos. Estoy hablando del año 1970, es decir, hace cincuenta años. Ya saben lo que pasó.
Quién me iba a decir que después acabaría fijando mi residencia en el Sur, en el Campo de Gibraltar, en Algeciras, cosas de la migración gallega, y además marino mercante, profesión por la que me decanté después de que cayera en mis manos un libro que de alguna forma marcó mi vida, “Luiso, (María, matricula de Bilbao)”, en el que el protagonista, Luiso, se embarca en el buque como plan de formación para el futuro. El armador era su abuelo, siendo un chaval de 15 años: ¡Qué gran “Universidad” para el!
Hoy sigo manteniendo la misma opinión, no ya con los aeropuertos, AVES, etc., sino también con las autoridades portuarias que tenemos en este país. Sí, leen bien, con las 28 Autoridades Portuarias que tenemos en este país.
La semana pasada el mundo marítimo portuario se despertó con una noticia, la cual ha tenido muy poca repercusión en la zona y me atrevería a decir que no es conocido por una amplia mayoría de campogibraltareños. Me estoy refiriendo a la fusión de los Puertos de Amberes y Brujas, dos ciudades distantes 100 kilómetros y a poco más de una hora en coche.
Posibilita la utilización de sinergias y aprovechamiento de otros tráficos para ambas ciudades, en definitiva, hace más fuertes a ambos
Este proceso, no se ha iniciado ahora, empezó en el año 2018, pero sí es ahora cuando se ha tomado la decisión definitiva, la fusión entre las autoridades de Amberes y Brujas que convierten al puerto de Amberes-Brujas en el primer puerto, no de Flandes, ni de Bélgica, sino en el primer puerto de Europa, por delante del de Rótterdam.
La situación de Algeciras y Cádiz tiene mucha similitud con lo anterior. Las dos están en la provincia de Cádiz, las dos distan 100 kilómetros, están a poco más de una hora por carretera, Algeciras además es el primer puerto español en cuanto a volumen en toneladas, y esta hipotética fusión, Algeciras-Cádiz, posibilita la utilización de sinergias y aprovechamiento de otros tráficos para ambas ciudades, en definitiva, hace más fuertes a ambos y por tanto generará más riqueza, ayudando a reducir el gasto publico.
El sistema portuario español no puede ser gestionado como hasta ahora. Tenemos 46 puertos de “interés general” gobernados por 28 Autoridades Portuarias. Vivimos en un mundo globalizado, lo queramos o no. Se han fusionados navieras, bancos, etc., por no hablar de la reducción de ayuntamientos en Francia e Italia, pero no, aquí seguimos anclados en un sistema que no funciona, bueno a lo mejor funciona como retiro dorado para los partidos políticos.
Tenemos 7.661 kilómetros de costa, seguimos viviendo de espaldas al mar cuando mas del 90% del trafico comercial mundial se realiza por vía marítima.
Yo ya hubiera puesto sobre la mesa esta opción, no se trata de ir en contra de nadie, pero Algeciras y Cádiz con esta fusión ganan y por tanto ganamos todos y ahora que ya se vislumbra la autorización para la ampliación norte del Puerto de Valencia, con más razón todavía y como en el caso de Amberes y Brujas, esta fusión debería ir más allá de la suma de toneladas, y centrarse en la sostenibilidad, resiliencia y liderazgo en la transición en la que nos encontramos.
