Acusar, juzgar, condenar, ejecutar y luego… informarse
No pararán. Les ha dado por ahí. Y tampoco tienen tantos temas con los que les abran cada día las puertas de los medios. Nada que objetar. Salvo que están jugando con el medioambiente y con el pan de decenas de miles de familias, poniendo en el otro lado de la balanza, básicamente, inexactitudes y mentiras.
- 07 mayo 2021 01:00
- Última actualización
06 mayo 2021 17:26
Esquerra Republicana, Compromís y Unidas Podemos continúan en su espiral de ataque directo al Puerto de Valencia. ¿Los motivos para tanta y tan irrespetuosa inquina? Ni idea.
Empezaron argumentando que en las obras de ampliación el dragado era mayor y que el dique de abrigo era más largo. Se suprimieron esos y otros aspectos de la obra y... siguieron.
Solicitaron verificar que no hacía falta una nueva DIA, se confirmó de modo rotundo y oficial que no hacía falta. No pararon.
Los técnicos y organismos oficiales responsables de la obra, han concluido por activa y por pasiva que la ampliación es “inocua para las playas del norte y del sur de Valencia”. Pero... ¿Qué sabrán los técnicos que llevan 9 años haciendo informes trimestrales al respecto?
Nuestros políticos conocen a ciencia cierta que una obra que lleva acabada 10 años, de un momento a otro, como si fuera un volcán, acabará con toda la vida que le rodea, flora, fauna, humanos, playas y Albufera incluida. Lo que no dicen es cuándo será eso, más o menos. Por pedir hora en la peluquería, digo.
Aquí, por el inmenso respeto que el tema nos merece, indicamos que sí, que las obras de ampliación del Puerto realizadas hace 60 años tienen efecto sobre las playas del sur. Y del norte. Que desde entonces se afectó a las corrientes norte-sur, causando un efecto sombra que amplía las playas de Las Arenas y la Malvarrosa en el norte y la de Pinedo en el Sur. Ese mismo efecto sombra acelera la regresión de las playas más al sur. Que esa regresión la sufren la práctica totalidad de las playas del planeta por la falta de aportación de sedimentos de los ríos, por las tormentas cada vez más intensas y frecuentes debidas al cambio climático y por, en definitiva, el calentamiento global que hace subir el nivel de los mares de modo imparable.
Por cierto, próximamente se reúnen, al fin, con los técnicos. Llevan años acusando, juzgando, condenando y ejecutando. Y ahora se informan. Así nos va
Podemos quitar piedra a piedra la ampliación. ¿por qué no? Pero teniendo claro que eso no va a repercutir en nada a las playas.
Podemos, claro, quitar también todo el Puerto de Valencia o cualquier otro puerto. Pero dejando claro que eso tampoco va a parar la regresión de las playas. Las del sur tendrán un retroceso más lento y las del norte mucho más acelerado, hasta que el agua llegue tierra adentro, donde llegaba a mediados del pasado siglo, como muestran las fotografías antiguas hechas antes de la construcción del Paseo al Faro del Puerto de Valencia.
Adiós a las playas de las Arenas y de la Malvarrosa. Adiós a la Marina Real. Adiós al Paseo Marítimo. Puede ser que a alguien le guste ese panorama. Pero entonces, lo que ha de hacer es, sencillamente, ponerlo en su programa electoral claramente.
Por ejemplo: “No nos gusta el puerto, queremos quitarlo. No nos importa que desaparezcan las playas del norte con tal de que las playas del sur retrocedan algo más lentamente. Queremos suprimir el principal caudal y motor de la economía de la Comunidad Valenciana y de media España”. Y... que la gente vote. Prometo acatar el resultado. Y no pedir más votaciones esperando que salga lo que yo quiera.
El pasado miércoles - yo mismo lo oí decir en Les Corts- se manifestó que no quieren una nueva DIA, “sino un nuevo proyecto”. Solo les faltó lo que les falta siempre: proponer alternativas. Ah, y también quieren que la ZAL se vaya de ahí. Pero claro, tampoco indican dónde ha de ir.
Cada cual puede opinar lo que quiera, pero no podemos consentir determinadas faltas de respeto ni acusaciones sin fundamentos. Por el bien del medioambiente y de la economía, por ese orden.
Por cierto, próximamente se reúnen, al fin, con los técnicos. Llevan años acusando, juzgando, condenando y ejecutando. Y ahora se informan. Así nos va.