Una visión superficial de la reciente reestructuración de servicios entre Europa y Asia de la 2M nos deja una serie de conclusiones bastante lógicas que son las que van marcando las tendencias del mercado marítimo mundial.Poco a poco se reduce el número de escalas en las grandes rutas asiáticas, otorgando un mayor protagonismo a los grandes hubs interoceánicos. En el caso de las conexiones con el norte de Europa, por ejemplo, dos puertos del TOP 5 europeo, como son Rotterdam y Bremerhaven, mantienen un dominio absoluto con presencia en cuatro de los seis servicios semanales, incluso con escalas dobles.En estas conexiones llama la atención que Hamburgo se haya quedado con una sola escala de las seis posibles y que Felixstowe, séptimo puerto del TOP 10, haya incrementado su presencia hasta en cuatro servicios, lo que sin duda va a favorecer el crecimiento de este recinto portuario en los próximos meses.En el caso de los recintos alemanes de Bremerhaven y Hamburgo es muy posible que haya pesado mucho en la decisión la eficiencia de las escalas ya que el desplazamiento por el Elba hasta llegar a Hamburgo puede justificarse si no hay otra alternativa, pero estando Bremerhaven a 130 kilómetros, con conexiones terrestres eficientes y con dos terminales de MSC y APMT... pues eso.Pero no siempre hay que buscar la correspondencia empresarial. El puerto de Felixstowe, por ejemplo, es uno de los grandes beneficiados de esta reestructuración, con presencia en cuatro conexiones de las seis que se han establecido.El Puerto de Algeciras se ha colado en dos de las conexiones entre Asia y el norte de Europa, una menos que su vecino de Tánger y una más que el portugués de Sines, con lo que se equilibran las fuerzas en el mercado de transbordos.En el caso de las conexiones entre Asia y el Mediterráneo, la 2M ha configurado cuatro conexiones semanales en las que comparten protagonismo Gioia Tauro, La Spezia, Barcelona y Valencia, con escalas en dos servicios. Atrás quedan aquellos años en los que Valencia no solo acaparaba presencia en el Mediterráneo sino que además se colaba en los del norte de Europa gracias a su eficiencia en el transbordo, en términos de costes y productividad, compartiendo carga ahora con otros puertos que se presentan como opciones más eficientes.La opción de afianzarse como hub mixto, de transbordo y carga local, sigue siendo la carta ganadora de los puertos de Barcelona y Valencia. A partir de ahí, ofrecer una alternativa competitiva para el transbordo es lo que acabará por definir la inclinación de la balanza.En medio de todo este juego de escalas que genera la 2M, sigue existiendo un amplio abanico de posibilidades para todos los demás mediante conexiones rápidas y capaces de enlazar puertos y mercados que se han quedado fuera del mapa de los grandes. Estas redes "menores", lo queramos o no, se configuran en función de la tendencia que marcan las dos primeras navieras del mundo. Existen oportunidades, pero hay que buscarlas y trabajarlas, sin duda.