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Las autopistas ferroviarias no son nuevas

  • Última actualización
    22 julio 2024 05:20

La teoría la tenemos clara. Buscar sinergias entre los modos de transporte es fundamental para consolidar una cadena logística fuerte que oferte unos servicios integrales trufados de soluciones intermodales. Lo sabemos y en ello se trabaja; ahora, con la Estrategia de Movilidad Segura, Sostenible y Conectada 2030 del Ministerio, y antes.

Por eso, las autopistas ferroviarias en España no son nuevas. ¿Podríamos remontarnos hasta 2007 para hablar de la primera? Pues depende de con quién hablemos. Según “internet”, la primera autopista ferroviaria fue inaugurada en 2007 y conectaba el puerto de Barcelona con Granollers. Según Adif, 2024 iba a ser el punto de partida para la materialización de estas autopistas ferroviarias en España con los corredores de Valencia-Madrid, Algeciras-Zaragoza y Barcelona-Tarragona-Madrid. ¿Será así?

Lo que está claro es que las AAFF (por abreviar) tienen el objetivo de mejorar la eficiencia logística y reducir el tráfico de camiones en las carreteras, lo que supone, en principio, promover un transporte más sostenible -nos dicen que el ferrocarril es el modo más eficiente ambientalmente hablando- y hacer más rentable la actividad -nos dicen que esto será así con recorridos a partir de los 300 kilómetros-. Además, son un ejemplo de colaboración entre los diferentes modos (carretera, ferrocarril y marítimo) y, obviamente, entre los operadores que los gestionan y coordinan.

Que el transporte de mercancías por carretera siga siendo altamente competitivo y flexible no es malo señor Puente

Así que, como no podía ser de otra manera, estamos todos emocionados con que la AAFF Valencia-Madrid que hoy se inaugura oficialmente, con la visita del ministro Óscar Puente, tenga una larga y próspera vida. Hace años que hablamos de proyectos de este tipo (de hecho, la mencionada ya se publicitaba en 2021), pero las complejidades derivadas de poner en marcha este tipo de iniciativas no son pocas.

Lo que está claro es que el Gobierno está implicado y comprometido con las AAFF y su ministro también. Sus primeras palabras, cuando tomó posesión de su cargo, ya recogieron metas de esta índole. La Estrategia de Movilidad, con una línea de actuación concreta para incrementar el transporte ferroviario de mercancías e impulsar las AAFF en España, y la Iniciativa Mercancías 30, sin duda, vinieron a confirmarlo. No obstante, aunque hoy sea un día de celebración, espero que la tensión por alcanzar la misión inicial no se reduzca y que Puente atienda a las demandas del sector que no habla por hablar.

Los problemas están más que detectados. Se necesitan inversiones: dineros y planificación. Tenemos infraestructuras -estaciones, vías, terminales- que no pueden soportar la alta capacidad que exige el transporte intermodal lo que impacta en la capacidad de las líneas y sin capacidad hay muchas papeletas para que se produzca congestión, impuntualidad e ineficiencias. A esto se suman los diferentes anchos y la interoperabilidad técnica que derivan en desconfianza en las AAFF y escasa demanda de estos servicios. La pescadilla que se muerde la cola.

Por cierto, en todo este listado de cositas por mejorar no hay ningún punto en el que se diga que la carretera es responsable de que no se impulsen las AAFF, así que a ver si, en esta ocasión, tenemos suerte y el ministro de todos los modos de transporte no nos ensalza los grandes hits de uno de ellos, despreciando a otro.

Que el transporte de mercancías por carretera siga siendo altamente competitivo y flexible no es malo, señor Puente. Lo que tienen que lograr es que los volúmenes de carga se suban voluntariamente al tren porque éste les pueda ofrecer un precio adecuadito y condiciones eficientes.