Desde el varadero del Náutico de Tarragona, una embarcación ha sido la encargada de sumergir los biotopos, que tienen como objetivo, recuperar las poblaciones de cefalópodos de interés pesquero como la sepia, el calamar y el pulpo y las fanerógamas marinas como la posidonia oceánica, conocida como el alga de vidrieros y la Cymodocea nodosa.
En la operación se ha sumergido un total de 7 palets de biotopos, con un peso medio de 250 kg aproximadamente cada uno. Estos elementos, construidos con materiales naturales biodegradables, se han colocado a una profundidad de entre 10 y 14 metros en los puntos elegidos en la zona la Punta de la Playa del Miracle.
Mientras el remolcador depositaba al mar los biotopos de gran tamaño, los representantes de los medios de comunicación y los representantes de las organizaciones implicadas en el proyecto de restauración marina, han sido testigos de la inmersión desde la embarcación 'Golondrina' Tarragona Azul.
El proyecto es financiado y liderado por el Port de Tarragona, diseñado y ejecutado por un equipo científico de la universidad Rovira i Virgili, formado por las empresas TecnATox y Deepsea Numerical.
La colocación de biotopos en la Punta del Miracle es la primera de las tres previstas en este proyecto. La segunda y tercera se realizarán ante el dique de Levante del Port de Tarragona en las próximas semanas. Las tres ubicaciones han sido seleccionadas en función de las condiciones óptimas para instalar estas estructuras y en función de la detección de espacios donde las comunidades marinas no están plenamente desarrolladas o han sufrido problemas de degradación ambiental.
El Port de Tarragona coloca biotopos en la punta del Miracle para favorecer la regeneración de la vida marina. Biotopos, historia y recuperación marina bajo el marLos materiales empleados para la fabricación de los biotopos son biodegradables y provienen de elementos reciclados, lo que también contribuye a fomentar la economía circular. Algunos de los materiales son maíz, paja, saco de yute, bambú, vidrio, etc. diseñados para que se desintegren en un marco temporal de tres a cinco años, mezclándose en la arena de la playa.
Todos los biotopos que se instalarán en el fondo marino guardan una relación directa con el pasado romano de Tarragona y quieren ser un homenaje al pasado histórico de la ciudad a través de bases de columnas, ánforas, mosaicos y otros elementos arquitectónicos y utensilios de época romana. Los diferentes modelos de biotopos están inspirados en los hallazgos hechos en el antiguo yacimiento de carbunclo, una zona cerca del Puerto Deportivo, y otros elementos del patrimonio arqueológico de Tarragona.
Los biotopos también representan fragmentos inspirados en la Torre de los Escipiones, con dimensiones de 1,3 x1,3 x 1,3 metros; escenarios con ánforas, de 1,2 x 0,7 metros; columnas romanas de 40 cm de diámetro y 1,2 metros de alto; y diferentes tipos de losas de 40 x 30 x 0,15 cm.
Todos estos materiales son idóneos para contribuir al desarrollo de algas de fanerógamas y invertebrados marinos (pulpos, calamares y sepias). La forma, dimensiones y disposición de las ánforas, por ejemplo, es adecuado para que las especies puedan encontrar refugio y protección y facilitar su reproducción.