ALICANTE. La UTE formada por Shiroten 10, Restauración Forty Gestión y Yansika Holding será la encargada de gestionar este espacio situado en el Muelle 12 del Puerto de Alicante. Esta es una de las zonas que la APA reserva a uso ciudadano, y que está destinado a la organización de actuaciones musicales, eventos gastronómicos y otras actividades de carácter cultural.
El proyecto ganador, denominado “Ocean Live” se ha diseñado como un espacio multifuncional y adaptable a cada tipo de evento, con espacios fluidos y bien distribuidos, para ofrecer una experiencia cómoda y envolvente.
Tres zonas diferenciadas, pero modulables en función de los aforos máximos, albergarán la parte que hará las veces de auditorio, con asientos o despejado según el evento; otro espacio central pensado para la cultura; y una zona gastro, cada una de ellas decorada con temáticas y coloridos diferentes.
Todos los materiales son reciclados y se han escogido respetando criterios de sostenibilidad.
El escenario se ha orientado hacia el mar, para minimizar el impacto acústico hacia la ciudad, aunque los horarios marcados por la Autoridad Portuaria para las actividades, también lo reducirán, ya que el límite de cierre se sitúa en las 00.30 horas.
Respecto a los eventos, se han planteado más de 40, programados y respaldados con precontratos, incluyen actuaciones musicales, culturales y gastronómicas de primer nivel, lo que significa un gran impulso para la oferta de ocio de la ciudad, y la dinamización económica de la zona que, junto a las obras de modernización de los paseos, y de los locales comerciales de la Marina, se está convirtiendo en uno de los iconos más emblemáticos y visitados de la ciudad.
Una vez comunicada la autorización, la UTE titular de la misma, dispondrá de un plazo de 15 días para aceptarla, y consignar una fianza de explotación que asciende a más de 732.000 euros, ya que, ante la singularidad y dimensión de esta autorización, se había previsto, en el pliego de condiciones generales y particulares, el establecimiento una garantía, equivalente al 100% de las tasas correspondientes a un año.
De esta manera, la Autoridad Portuaria se aseguraba así que, cualquiera de las empresas que ganara el concurso, pudiera responder de todas las obligaciones derivadas de la autorización concedida, o de las sanciones por incumplimiento, en caso de que las hubiera.