El primer servicio, una composición de 20 vagones, más la locomotora, partió de la factoría de ArcelorMittal en Trasona (Avilés) con una carga de bobina laminada en caliente de 1.440 toneladas brutas.
Estas locomotoras emiten “Cero CO2” al ser 100% eléctricas y al tener certificado Renfe Mercancías el consumo de energía eléctrica proveniente de fuentes renovables.
Renfe Mercancías es el principal operador ferroviario de ArcelorMittal, y su objetivo básico es ofrecer a su cliente el mejor servicio al mejor coste posible. Por ello, ante los retos para el transporte de mercancías que supone el ahorro de emisiones de CO2, ambas compañías han reforzado su relación comercial con el aporte progresivo por parte de Renfe de 12 locomotoras nuevas de gran potencia y con mayor capacidad de tracción y carga. Además de mejorar la seguridad, la fiabilidad y la disponibilidad, poseen baja agresividad frente a la vía, menor nivel de ruidos y ausencia de vibraciones.
Renfe Mercancías aspira a alcanzar la máxima eficiencia como base de su competitividad, y por ello, el incremento de su actividad conlleva significativos ahorros de costes por externalidades en tanto que, tal como reconoce la Comisión Europea, el ferrocarril es el modo de transporte de mercancías que menos emisiones contaminantes genera.