Sus beneficios para la movilidad sostenible han hecho que la demanda de las baterías de litio, catalogadas como mercancía peligrosa, se dispare.
MADRID. Es indiscutible que las baterías de litio están de moda por configurarse como la alternativa a los combustibles fósiles en el sector del transporte.
Este metal ligero está llamado a liderar la transformación del parque de vehículos a uno no contaminante, tanto turismos como industriales. Las baterías de litio son las necesarias para poner en marcha los vehículos eléctricos, la gran solución para alcanzar los objetivos de descarbonización impulsados desde Europa.
Entre sus principales ventajas destacan una vida útil más larga, tiempos de carga más rápidos y un peso más ligero. Sin embargo, según recoge el portal estadístico Statista, China copa el 77% de la capacidad de producción de baterías, mientras que Europa únicamente cuenta con el 6%.
Entre sus principales ventajas destacan una vida útil más larga, tiempos de carga más rápidos y un peso más ligero
Estas cifras ponen de manifiesto la alta dependencia de Europa (y del resto del mundo) para la fabricación de estos componentes.
Con el objetivo de no incurrir en la misma situación de dependencia energética con Rusia, y contar con independencia tecnológica, Europa ha anunciado la puesta en marcha de 40 nuevas gigafactorías de baterías hasta 2030, según recoge el centro de investigación vasco para almacenamiento de energía electroquímica y térmica, CIC EnergiGUNE. De estos 40 proyectos, cuatro se encuentran en España, concretamente en Sagunto (Valencia), Vitoria, Navalmoral de la Mata (Cáceres) y Badajoz.
Se espera que aproximadamente para 2030 la demanda anual de baterías solo en España se acerque a los 75 GWh, lo que supondría la necesidad de contar con 2 ó 3 gigafactorías en el país para ese año, según recoge el CIC, que a fecha de 2021 detectó 11 iniciativas en España.
“El auge de este tipo de proyectos responde al carácter estratégico e impacto socio-económico que pueden tener para las diferentes Comunidades Autónomas en las que se ubiquen estas gigafactorías, lo que está provocando una carrera y competición entre distintas zonas de España por ser quienes acojan finalmente estos proyectos”.
EN DETALLE
A nivel europeo, las mayores reservas de litio se encuentran en República Checa (31%), Serbia (27%) y Ucrania (15%). A continuación aparece España con el 13%, y el resto de estados cuentan con reservas muy limitadas (Francia 4% y Alemania 3%), según recoge el CIC.
Con todo esto, los expertos de la industria predicen un crecimiento anual de más del 30% de toda la cadena de suministro de baterías de litio, desde la minería hasta el reciclaje, de 2022 a 2030, tal y como señala el Senior Vice President Air Network & Global Trade Services de FedEx Express Europe, Jorn van de Plas.
Irónicamente, la principal desventaja de las baterías de litio es el riesgo medioambiental que se desprende de su fabricación, ya que se requiere una gran cantidad de agua para la extracción del litio, una gran cantidad de energía y, además, genera una cantidad importante de desechos y emisiones químicas.
Para solventar todos estos riesgos, la Unión Europea ha aprobado un nuevo reglamento sobre baterías “para prevenir y reducir los impactos adversos de las baterías en el medio ambiente y garantizar una cadena de valor segura y sostenible para todas las baterías, teniendo en cuenta, por ejemplo, la huella de carbono de la fabricación de baterías, el abastecimiento ético de materias primas y la seguridad del suministro, y facilitando la reutilización y el reciclaje”.
Los expertos de la industria predicen un crecimiento anual de más del 30% de toda la cadena de suministro de baterías de litio
Este incremento en la demanda y en la oferta de baterías de litio obliga a poner el foco en el transporte de las mismas. En este sentido, Jorn van de Plas, explica que la gestión del transporte aéreo seguro de baterías de litio es clave y que debe comenzar mucho antes del despegue del avión.
“Aunque aparentemente están omnipresentes en los productos que utilizamos todos los días, las baterías de litio no están exentas de riesgos. A menudo una batería sobrecargada o dañada puede provocar un cortocircuito; quemarse espontáneamente o pueden calentarse hasta el punto de provocar un evento térmico. La explosión de una batería de litio provoca un incendio de aproximadamente 2.000º C. Más importante aún, debido a que las sales de litio de la batería son auto-oxidantes, no se pueden extinguir como un fuego tradicional”, explica Jorn van de Plas.
Seguridad en el aire
Debido a los riesgos que plantean las baterías de litio, la industria de la aviación se toma muy en serio el desarrollo de protocolos de seguridad y buenas prácticas para su transporte.
Las baterías de litio están clasificadas por la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA por sus siglas en inglés) como mercancías peligrosas (DG por sus siglas en inglés) de clase nueve.
“Siempre que los envíos de baterías de litio viajan por vía aérea, se toman una serie de medidas de seguridad al cargar el avión. Esto incluye una práctica conocida como ‘segregación de la carga’, en la que las baterías de litio se almacenan separadas de los productos altamente inflamables”, detalla el Senior Vice President Air Network & Global Trade Services de FedEx Express Europe.
Además, explica que los envíos que contengan baterías de litio no se transportan en palés abiertos, si no en contenedores cerrados para limitar la propagación de posibles incendios o combustión cuando se exponen al calor. “Los envíos de baterías de litio tampoco se deben disponer junto con carga pesada que podría causar daños si se moviera en vuelo”, subraya.
“La seguridad se mejora aún más mediante el uso de cubiertas contra incendios, y en nuestros aviones Boeing 777 y MD-11, que cruzan el Atlántico y el Pacífico, utilizamos un sistema de extinción de incendios incorporado. El sistema, desarrollado por FedEx, está instalado en la zona de carga principal y controla aumentos significativos en la temperatura de los contenedores. El panel de estado del sistema proporciona a la tripulación de vuelo el estado operativo y, en caso de sospecha de incendio, identificará la posición del contenedor para desplegar un agente extintor de incendios”, comenta el directivo de FedEx, quien subraya que la mejor mitigación es la prevención. “La colaboración, la formación y una manipulación adecuada siguen siendo vitales para garantizar el transporte seguro de baterías en el aire”, destaca.