Aurelio Martínez, catedrático de Economía aplicada y expresidente de la Autoridad Portuaria de Valencia, abrió la sesión de ponencias del sábado para repasar las tendencias del mercado global, que, en base a los estudios de distintas organizaciones internacionales, dibuja un futuro de las relaciones comerciales que apunta a tasas de crecimiento más moderadas en el futuro.
Ello va acompañado de un resurgir del proteccionismo o nacionalismo económico, lo que a su juicio es una tendencia en expansión que genera una situación “delicada”. “Las guerras comerciales sabemos cómo empiezan, pero no cómo acaban”, dijo Martínez, quien aludió también a la inestabilidad y la incertidumbre como otros dos factores relevantes a la hora de explicar el actual panorama económico.
Neoproteccionismo
“El mundo se ha hecho mucho más inestable, con más hechos negativos relevantes en los últimos cinco años que en los 40 años anteriores. Además, la crisis del Canal de Suez está alterando el mapa logístico y reconfigurando los tráficos, concediendo a África Occidental un papel importante en el futuro si esta tendencia se consolida”, dijo,
Durante su exposición, Aurelio Martínez expuso los cambios que se están produciendo en el marco de referencia económico, con una caída de la elasticidad del comercio que provoca menores tasas de crecimiento del comercio internacional.
Entre sus causas, destacó el agotamiento de las cadenas de valor e incluso la reversión limitada en algunos casos; el reshoring o la reversión de la producción de ciertos productos estratégicos, frente a la deslocalización anterior; la conciencia de la necesidad de una política industrial activa y el resurgir del neoproteccionismo y del nacionalismo económico.
Afecciones al transporte marítimo
Apoyando su exposición con numerosos datos recabados de las principales instituciones internacionales como la UNCTAD o el Banco Mundial, y consultoras especializadas, como Drewry o Alphaliner, entre otras, Aurelio Martínez explicó también cómo todos estos cambios van a afectar al sector marítimo, en referencia al menor crecimiento del comercio internacional; la mayor concentración e integración empresarial horizontal y vertical; la relocalización de los recursos públicos y privados; la concentración de la carga, con el gigantismo en el sector marítimo; la concentración de los tráficos en pocos puertos y el rediseño de rutas y escalas, o el rediseño del papel de todos los actores de la cadena logística si quieren sobrevivir.
Previsiones inciertas
“¿Qué va a pasar en 2024 y 2025?”, interrogó el catedrático de Economía aplicada y expresidente de la Autoridad Portuaria de Valencia, quien respondió a la pregunta con un “depende”, que definió como la “palabra mágica para los economistas”, y en la que incluyó la evolución de factores como la guerra de Ucrania; los precios y salarios; las materias primas, sobre todo energéticas; la política monetaria; la gestión del problema inmobiliario o financiero en China; la cohesión europea; la guerra tecnológica China-EEUU; las elecciones en EE.UU.; el neoproteccionismo y el resurgimiento de los bloques comerciales, entre otros.
Gran incertidumbre
Aurelio Martínez continuó su detallada exposición anunciado las previsiones, siempre fundamentadas en instrumentos de medición aportados por fuentes solventes, sobre la evolución del marco global del comercio en el corto y medio plazo. Así, pronosticó una recuperación “lenta y desigual”, en un entorno de “mucha incertidumbre” alimentada por las crisis de China, Rusia-Ucrania, la guerra de Gaza y la tensión lrán-Israel; los resultados electorales en diferentes países; la crisis de la deuda; el neoproteccionismo y el reshoring; la baja y estabilización de los fletes, los cambios en las rutas en cadenas logísticas y el gigantismo de los barcos con una oligopolización creciente con por la mayor concentración horizontal y vertical, entre otros elementos.