La búsqueda de la máxima eficiencia de la cadena de suministro de los productos hortofrutícolas y perecederos es un objetivo compartido por productores, consumidores y cargadores, que detectan puntos de mejora en su transporte y logística.
BILBAO. Nuria Lacaci, secretaria general de la Asociación de Cargadores de España (ACE), habla con este Diario de las necesidades y retos del sector.
¿Cómo valora ACE la situación actual del sector de la logística alimentaria y de perecederos?
España no solo es la huerta de Europa, sino que exporta frutas, verduras, carnes y pescado a todo el mundo. Esta tradición exportadora convierte al sector logístico que da cobertura a la actividad, en un sector muy competitivo, pero, a la vez, muy dependiente de la demanda de consumo que, en estos momentos, está en sus horas más bajas.
El alza de los precios de los alimentos y en particular de los productos frescos tiene causas diversas, como la energía o la sequía ¿es también el transporte una de sus causas? ¿En qué medida?
El precio del transporte se ha encarecido en el último año hasta un 20% y eso repercute en el precio de todos los productos que consumimos, lo que incluye la alimentación y, dentro de ella, los productos frescos.
Parte de esta subida responde a la necesidad de mejorar la rentabilidad del sector y parte al incremento del precio del combustible. En el caso de los perecederos, el viaje a temperatura controlada es más dependiente del precio del gasóleo, al utilizarse también para el funcionamiento de los equipos de refrigeración.
“El sector logístico es muy dependiente de un consumo que está en sus horas más bajas”
¿Es el cargador el más afectado en la situación actual? ¿Por qué?
La escalada de costes de energía, materias primas, financiación, etc. afecta a los cargadores, a las empresas de transporte y al consumidor final, es un escenario inflacionista en el que todos perdemos.
¿Ha perdido competitividad el sector agroalimentario en el último año?
No sé si ha perdido competitividad, pero lo que sí ha perdido es volumen de mercado. Según estadística de comercio exterior español (DataComex) se han exportado de enero a junio de este año 801.994 toneladas menos de frutas, verduras y legumbres que en el mismo periodo del año pasado, mientras que se han importado 582.338 toneladas más.
EL DATO
+20%
precio transporte. El precio del transporte se ha encarecido en el último año hasta un 20%, según sostiene la Asociación de Cargadores,
¿Es la cadena de suministro un punto fuerte o un punto débil para este sector?
Las cifras anteriores muestran que la cadena de suministro es un punto fuerte, capaz de dar una respuesta rápida a las variaciones de la oferta y la demanda en el sector hortofrutícola.
¿Cuáles son a juicio de ACE los grandes retos logísticos del sector hortofrutícola y de productos frescos y congelados?
La digitalización, trazabilidad y visibilidad en tiempo real, es decir la tecnología que ya está disponible para tener una visibilidad total de la mercancía y que todavía, en este y otros sectores, no está tan implantada como nos gustaría.
“El impulso que se está dando al ferrocarril de mercancías no está llegando todavía a los perecederos”
¿Cuáles son las principales propuestas de ACE para mejorar la competitividad de la cadena de suministro del sector agroalimentario en general y de perecederos en particular?
Los cargadores necesitamos que las empresas de transporte de perecederos den un salto cualitativo en materia de digitalización y sostenibilidad. Además, se debe promover al mismo tiempo la generación de espacio logístico y de almacenamiento adecuado, porque la escasez actual está afectando a la actividad.
“Hay una grave falta de chóferes”
¿Existe flota suficiente para atender la demanda hortofrutícola? ¿Cuenta dicha flota con la tecnología adecuada para optimizar su actividad?
Existe flota suficiente, pero presenta carencias en la tecnología necesaria para un correcto seguimiento y control de la temperatura, algo fundamental en el transporte de producto fresco.
Además, en el caso de distribución a punto de venta en el interior de las ZBEs, la exigencia de vehículos de cero emisiones es difícil de cumplir, porque no hay todavía una amplia oferta de vehículos frigoríficos eléctricos.
¿Preocupa la escasez de chóferes para operar las flotas frigoríficas?
Por supuesto, estamos viendo cómo hay una grave falta de conductores que se agudiza cuando se trata de viajes internacionales en los que el conductor pasa muchos días fuera de casa. Esperamos que la incorporación que se está produciendo de conductores extranjeros pueda paliar esta falta de personal de conducción.
Desde ACE siempre hemos defendido que el transporte profesional debería quedar exento del pago por uso de la red viaria o, en su defecto, establecer una bonificación, de manera similar a como se hace con el gasóleo profesional.
“Hay cargadores miembros de ACE que, por el volumen que mueven, tienen capacidad para implantar nuevos flujos, en colaboración con sus proveedores de transporte, creando un nuevo espacio colaborativo”
La logística de perecederos sigue dominada por la carretera. ¿Cómo observa ACE el desarrollo del ferrocarril y la multimodalidad en este sector?
El impulso que se está dando al ferrocarril de mercancías no está llegando todavía a los perecederos. La logística y el transporte de estos productos es más exigente, con unas necesidades adicionales de control, visibilidad y trazabilidad, que el ferrocarril no tiene totalmente implantadas. Además, la multimodalidad añade un reto adicional como es el mantenimiento de las condiciones de humedad y temperatura durante el trasvase de modo.
Con relación a la sostenibilidad de la cadena de suministro, ¿qué avances se han producido?
Si hablamos de camiones, hace tiempo que están funcionando los DUOs en pruebas, que, con determinadas mercancías, proporcionan un ahorro de emisiones de hasta el 30%. También se está trabajando ya con camiones eléctricos en recorridos nacionales de media y larga distancia y se están desarrollando los primeros pilotos con HVO.
Pero también se está profundizando en la intermodalidad, se están abriendo nuevas rutas de transporte marítimo de corta distancia, que conectan Turquía y Norte de África con España, y nuevos trenes de mercancías que operan recorridos nacionales (Algeciras-Zaragoza, Algeciras-Madrid o Algeciras-A Coruña). Todo ellos con ahorros de emisiones que alcanzan el 70%.
ACE impulsa soluciones de transporte más sostenibles con un nuevo espacio colaborativo. ¿En qué consiste su propuesta?
Hay cargadores miembros de ACE que, por el volumen que mueven, tienen capacidad para implantar nuevos flujos, en colaboración con sus proveedores de transporte, con el objetivo de trasladar mercancía de la carretera, al barco o al ferrocarril, con el consiguiente ahorro de emisiones. Este espacio colaborativo permite dar visibilidad a estas nuevas soluciones, de tal manera que otros cargadores puedan encontrar oportunidades, no solo para mejorar la sostenibilidad de su cadena de suministro, sino también para abordar nuevos mercados y optimizar las operaciones.
El Corredor Atlántico como oportunidad para el reefer
La Asociación de Cargadores de España, representada por su presidente, Carlos Castán, y su secretaria general, Nuria Lacaci, y el Comisionado del Corredor Atlántico, José Antonio Sebastián, analizaron en una reunión mantenida el pasado mes de mayo, las oportunidades que generará a la industria la apertura del Corredor Atlántico, prevista para 2030.
Esta importante ruta de la Red Transeuropea del Transporte (Red TEN-T), que conecta la mitad Oeste y el Norte de la península Ibérica con Francia y Alemania, proporcionará conectividad ferroviaria a grandes cargadores, dando respuesta a los requisitos de sostenibilidad de las empresas y al incremento del tráfico de mercancías que se prevé en los próximos años.
José Antonio Sebastián se mostró optimista con el cumplimiento de los objetivos marcados en el Plan Mercancías 30 y manifestó su convencimiento de que se sobrepasará la cuota del 10% fijada por el MITMA. Ello lo sustenta en el crecimiento: de los tráficos reefer, consecuencia del incremento en las exportaciones de carne; de la automoción y sus componentes, tanto de exportación de vehículos y componentes, como de importación de vehículos asiáticos; de las importaciones de cereal y de las mercancías de otras industrias que han relocalizado su producción en Turquía o norte de África.