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LOGÍSTICA · Jornada acerca de los efectos de la crisis del mar Rojo en el comercio internacional, organizada por ACE.

Nuria Lacaci: “No tuvimos la culpa de la crisis del mar Rojo pero todos salimos afectados”

La Asociación de Cargadores de España (ACE) programó ayer en Logistics una mesa para debatir los efectos que la crisis del mar Rojo está teniendo en el comercio internacional, y lo hizo desde diferentes perspectivas: naviera, cargador, puerto y aseguradora. Según Nuria Lacaci, todos ellos, dedicados a la logística, han sido afectados sin tener culpa.

madrid. Con el objetivo de abordar las consecuencias y nuevos escenarios que ha dejado la crisis del mar Rojo, Mar Chao, presidenta de la AP de Valencia; Alberto Sáez, director de Operaciones en Deoleo; Ignacio Ballester, subdirector general de MSC España; y Javier Casells, manager de Marsh, contaron sus experiencias desde diferentes perspectivas.

La presidenta de la AP de Valencia, Mar Chao, se encargó de decir antes de nada que “el Puerto de Valencia está funcionando perfectamente, operativos y abiertos a toda la mercancía posible”. Y todo ello -igual que dar respuesta a la crisis del Mar Rojo- ha sido posible, “gracias a actuar como un puerto comprometido que busca dar los mejores servicios.

Alberto Sáez (Deoleo) comentó que la crisis se ha vivido “con mucho estrés” y que el mundo marítimo se enfrenta a “continuas disrupciones. Han subido los costes, han aumentado los stocks y los tiempos de tránsito también se han visto afectados”.

Por su parte, Ignacio Ballester señaló la importancia de “ser una compañía ágil”. En el caso de MSC, optaron por desviar toda su flota por la ruta del cabo de Buena Esperanza.

Al finbal, todos ellos coincidieron con Javier Casells, quien subrayó la importancia de “ser resolutivos, adaptarse a los cambios, trabajar en equipo y huir de la desinformación”. Los ponentes prestaron especial atención a “estar informados y comunicarse”, pues es el paso previo a “adaptarse a nuevas realidades, aprender unos de otros y buscar alternativas”, dijo Sáez. “Queremos que la mercancía fluya”, resaltó Ballester.