MADRID. El mercado marítimo, caracterizado en el último año por su inestabilidad, se enfrentaba a un nuevo desafío el pasado 1 de octubre cuando cerca de 45.000 trabajadores portuarios de la costa este de Estados Unidos se declararon en huelga en defensa de sus condiciones salariales.
La movilización, que apenas duró unos días, ha causado estragos en la cadena de suministro global. Como explica Carlos Lagares: “la huelga finalizó hace una semana, pero todavía hay congestión y retraso en las operaciones”.
Por su parte, Ana Hidrovo incide en que se trata de una solución temporal, ya que si no llegan a un acuerdo antes de 2025, hay previsión de que se reanude a partir del 15 de enero. Por ello, recomienda “plantear alternativas en Canadá y México y tener previsto un aumento de tarifas”.
Asimismo, desde el operador logístico han recordado que no se trata de una disrupción en una sola línea de la cadena de suministro, sino que afecta globalmente. En palabras de Lagares; “es un flujo continuo que Estados Unidos rompe, ya que los barcos se quedan allí y no llegan a otros puertos, lo que disminuye la capacidad y el espacio a nivel mundial”.
Esta situación se ve agravada por el hecho de que los puertos han seguido colapsados incluso días después de desconvocarse la huelga, es decir, una mínima disrupción altera la cadena de suministro en su totalidad. Por ello, Diego Díaz insiste en la previsión de alternativas y precios de cara a la posible movilización de enero. El 2025 no solo comenzará con previsión de disrupciones operativas, sino también con la certeza de que se establecerán nuevas alianzas marítimas.
Según Carlos Lagares; “las alianzas serán el gran cambio de 2025”, ya que el objetivo de las navieras es agilizar la cadena de suministro a través de nuevas colaboraciones, pero no es una tarea sencilla. “Se espera que en una primera fase, suframos ajustes en llegadas y salidas y haya menos fiabilidad, pero a medio y largo plazo debería funcionar correctamente”, continúa el director de ventas de Expeditors España.
Opinión similar tiene Ana Hidrovo, que pronostica que sea a mediados de 2025 cuando tengamos más información sobre los nuevos servicios y tiempos de tránsito. Por ello, concuerdan en recomendar a los clientes una mayor planificación para trabajar con tiempo suficiente y que la mercancía llegue a destino con antelación, disminuyendo así los menores contratiempos posibles.