VALENCIA. Durante el día de ayer, milicianos hutíes lanzaron un misil balístico antibuque desde Yemen hacia las rutas marítimas internacionales en el sur del Mar Rojo. El misil impactó en el buque “Zografia”, un granelero con bandera de Malta, el cual informó de un impacto, aunque confirmó que estaba en condiciones de navegar. Desde el barco se informó que no hubo heridos.
Los milicianos hutíes mantienen su presión sobre el comercio marítimo en el Mar Rojo
Las fuerzas armadas de Estados Unidos mantienen su presencia en la región del Mar Rojo.
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Las fuerzas militares hutíes han atacado en las últimas horas dos buques que transitaban por la región del Mar Rojo, tal y como ha confirmado el Mando Central de Estados Unidos (CENTCOM en sus siglas en inglés).
El lunes se produjo otro disparo de un misil de las mismas características, alcanzando al “Gibraltar Eagle”, un buque con bandera de Islas Marshall. El barco no reportó heridos ni daños importantes y continuó su viaje.
Por su parte, el ejército de Estados Unidos también mantiene sus acciones contra objetivos controlados por las fuerzas hutíes. Ayer martes, las fuerzas estadounidenses atacaron y destruyeron cuatro misiles balísticos antibuque hutíes preparados para lanzarse desde Yemen. El día anterior, las fuerzas hutíes lanzaron otro misil, que falló en vuelo e impacto en tierra.
En las últimas jornadas, la tensión ha crecido de manera notable en una de las zonas más importantes para el comercio marítimo mundial. La pasada semana, las fuerzas armadas de Estados Unidos y Reino Unido, con el apoyo de Países Bajos, Canadá, Bahrein y Australia, atacaron una serie de objetivos en zonas de Yemen controladas por los hutíes, con la finalidad de restablecer el libre tránsito de buques mercantes por el Mar Rojo.
Los gobiernos de Estados Unidos y Reino Unido emitieron una declaración conjunta el pasado 3 de enero en la que pedían el fin inmediato de los ataques y advertía que sus autores serían represaliados en caso de persistir en sus amenazas sobre las personas, la economía global y el libre flujo del comercio en las vías marítimas críticas de la región.
A pesar de la escalada bélica, los ataques en el Mar Rojo han continuado, incluido el lanzamiento de numerosos misiles y drones.