madrid. Entre los asistentes, acudieron otras figuras del Gobierno como el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska; la presidenta del Congreso de los Diputados, Meritxell Batet; el delegado del Gobierno en la Comunidad de Madrid, Francisco Martín Aguirre; la portavoz socialista en el Ayuntamiento, Reyes Maroto, junto con diputados, senadores y embajadores.
Hay dos temas fundamentales a nivel nacional que Puente indicó “estar muy mal”: la movilidad urbana sostenible y el transporte de mercancías. “En el transporte de mercancías es donde realmente estamos muy mal, porque no todo es de color de rosa”, pronunció Puente.
“España solamente alcanza el 4% de transporte de mercancías en tren frente al 17% de media de la Unión Europea. Estamos muy lejos de nuestro entorno y muy lejos de nuestro objetivo fijado para 2030, que es llegar al 10%”.
“Hay mucho trabajo que hacer”, reconoció el ministro. Según Puente, dicho trabajo se tiene que centrar en los corredores y en la intermodalidad, mejorando la conectividad de los puertos con el ferrocarril, apostando por los nodos logísticos y también por los procesos de descarbonización.
En cuanto a los nodos logísticos, “ya se está trabajando en ello”, afirma el ministro, por ejemplo, con los seis nodos logísticos que se están construyendo en el Corredor Atlántico.
Y además, añadió que “para mí el gran problema, el gran hándicap que tiene España es la movilidad urbana”, declaró el ministro. Reconoció que “no es una pata estrictamente del Ministerio” sino que aborda la competencia de los municipios, pero que “desde el Ministerio se podría hacer más y por ello se ha cambiado la infraestructura del mismo”.
“Cuando yo llegué había una secretaría general de Infraestructuras y otra de Transportes; ahora hay una general de Transporte Terrestre y otra de Aéreo y Marítimo. Pero nos faltaba la pata de movilidad sostenible, que tiene mucha relación con las ciudades y por ello creamos la secretaría general de Movilidad Sostenible”, detalló Puente durante su intervención.
“Lo que está muy claro es que España tiene que actuar en las ciudades”, dijo a propósito de la ley de Movilidad Sostenible, donde se marcan “retos importantísimos. Nos hemos fijado unos objetivos muy ambiciosos en lo que respecta al transporte de mercancías”, dijo Puente. Con ello, se refirió a la necesidad de aumentar los procesos de descarbonización en la aviación y en el sector marítimo, “pero las cifras donde son muy preocupantes se encuentran en las ciudades”.
El ministro de Transportes indicó que el 80% de la contaminación que producimos se encuentra en los entornos urbanos. “Hay que cambiar el dibujo, estamos muy lejos de los países vecinos. Probablemente eso implique un cambio cultural”.
Lamentó que desde el Ministerio no se tenga la capacidad de obligar al cumplimiento de los requisitos impuestos por la Ley de Cambio Climático para conseguir la descarbonización. “La ley establecía una serie de obligaciones, pero no se están cumpliendo porque no se indicaba las consecuencias del incumplimiento. Con lo cual, nos hemos encontrado con ciudades que directamente han optado por no implantarlas o ciudades que sí pero sin ningún tipo de régimen sancionador”, explicó. Uno de los ejemplos a los que aludió el ministro es el caso de Alicante, que “era una gran iniciativa, pero el alcalde Luis Barcala no añadió sanciones en el plan, por lo tanto, no hay resultados”.
Uno de los aspectos que Óscar Puente señaló ayer como tarea pendiente tiene que ver con la movilidad urbana. “Las Zonas de Bajas Emisiones no se están implantando en España muy a mi pesar, y es la realidad”, pronunció Puente.
Lamentó que desde el Ministerio no se tenga la capacidad de obligar al cumplimiento de los requisitos impuestos por la Ley de Cambio Climático para conseguir la descarbonización. “La ley establecía una serie de obligaciones, pero no se están cumpliendo porque no se indicaba las consecuencias del incumplimiento. Con lo cual, nos hemos encontrado con ciudades que directamente han optado por no implantarlas o ciudades que sí pero sin ningún tipo de régimen sancionador”, explicó. Uno de los ejemplos a los que aludió el ministro es el caso de Alicante, que “era una gran iniciativa, pero el alcalde Luis Barcala no añadió sanciones en el plan, por lo tanto, no hay resultados”.
Por ello, desde sus posibilidades, han optado por “la técnica del palo y la zanahoria; o si lo preferimos, más la zanahoria que el palo”, es decir, en beneficiar a todos aquellos ayuntamientos que se comprometan firmemente con las Zonas de Bajas Emisiones. “Lo haremos en forma de financiación, por ejemplo para la renovación de flotas etc.”, señaló el ministro. “Y a los que no lo hagan no les daremos ayudas. No tenemos otra salida”.
Según Puente, el problema está en las ciudades: “No podemos ser el único país de Europa que, después de haberle ganado espacio al coche para la bici y al peatón, eso se revierta”.
Sin embargo, Óscar Puente no se olvidó de mencionar que España es un país que se encuentra a la cabeza de numerosos aspectos relacionados con el transporte.
“Hemos dado un salto único en el mundo, hace cuarenta años éramos un país tercermundista en lo que a infraestructuras se refiere”, pronunció Óscar Puente. Y añadió que “en los últimos seis años se ha producido la mayor inversión en equipamiento en la historia de España”. No obstante, trasladó su visión en cuanto a detectar las prioridades, que, según Puente, están en la conservación y no tanto en ampliación.
El ministro Puente aseguró ayer que la Terminal Norte del Puerto de Valencia no corre peligro. “El único peligro sería que un juzgado nos lo tirara para atrás y, de momento, la resolución de las medidas cautelares nos ha dado la razón”. Según Puente, no se prevén incidencias y “lo lógico sería que para junio o julio la obra este adjudicada y empiece en plazo, con los avatares propios de cualquier obra de esta magnitud”.